Historia de portada
Fotos y texto: UWE S. MESCHEDE
Fue pura casualidad que el equipo de ¡DISFRUTA! y el equipo de Diseño Moda tuvieran planeado ir a cenar al Restaurante Carmen (Urbanización Celta, entre Los Llanos y El Paso) el mismo día que tuvimos la sesión de fotos de moda de caballero que les presentamos en la página 14. Lo teníamos claro: vamos juntos. Rápidamente cambiamos las reservas, invitamos a Leonardo, nuestro modelo, y preparamos la cámara para sacar fotos de la velada.
Nuestra mesa en la preciosa terraza iluminada de manera acogedora estaba puesta, como siempre, totalmente en blanco. Servilletas de tela blanca, un ambiente sosegado, música suave de fondo y un servicio muy atento… Y no es para menos: el Carmen es un referente en la gastronomía palmera y hay muchas razones para que el público que lo visita sea internacional. Pero lo que realmente hace que todo fluya es la excepcional cocina del jefe de cocina David, que con su encantadora sonrisa, se ha convertido en toda una celebridad en las Islas Canarias gracias una serie de anuncios televisivos y carteles publicitarios de una conocida cadena de supermercados.
A nosotros desde luego nos dejó más que satisfechos esa noche: con deliciosos filetes, pescado perfectamente preparado y exquisitas especialidades vegetarianas, excelentes vinos, maravillosos Gin-Tonics y muchísimo Baileys, con un servicio que se anticipaba a nuestros deseos hasta bien entrada la noche. ¿Cómo era eso? La vida es demasiado corta como para beber un vino malo.
Nuestra mesa en la preciosa terraza iluminada de manera acogedora estaba puesta, como siempre, totalmente en blanco. Servilletas de tela blanca, un ambiente sosegado, música suave de fondo y un servicio muy atento… Y no es para menos: el Carmen es un referente en la gastronomía palmera y hay muchas razones para que el público que lo visita sea internacional. Pero lo que realmente hace que todo fluya es la excepcional cocina del jefe de cocina David, que con su encantadora sonrisa, se ha convertido en toda una celebridad en las Islas Canarias gracias una serie de anuncios televisivos y carteles publicitarios de una conocida cadena de supermercados.
A nosotros desde luego nos dejó más que satisfechos esa noche: con deliciosos filetes, pescado perfectamente preparado y exquisitas especialidades vegetarianas, excelentes vinos, maravillosos Gin-Tonics y muchísimo Baileys, con un servicio que se anticipaba a nuestros deseos hasta bien entrada la noche. ¿Cómo era eso? La vida es demasiado corta como para beber un vino malo.
