En 1986 las cosas no eran muy diferentes a como lo son ahora: quienes querían irse de Alemania para probar suerte en el extranjero eran tildados de exóticos o incluso de locos. Al librepensador Harald Moranz le dió igual esto. Había contraído el virus de La Palma y decidió dejar atrás su vida, comprar un sensacional terreno por encima de Puerto Naos y comenzar a buscarse la vida creando un complejo turístico en una de las islas más bonitas del mundo.
Hasta 1988 iba a durar la construcción de los bungalows… y posteriormente le costarían también más nervios y un alto precio para aprender de sus errores: tuvo que superar muchos obstáculos y cambiar muchos planes. Sus intenciones se vieron truncadas… Pero llegó el año 1992 y con él, el gran amor de Harald, Ana. Y a partir de ahí todo fue viento en popa: Bungalows Morani, con sus cuidadas y tranquilas residencias turísticas, sus espectaculares vistas a una altura de tan solo 200 m sobre el nivel del mar y su cercanía a Puerto Naos se convirtió en un destino turístico muy popular. ¡Y sigue siéndolo hoy en día!
“Quién no osa, no gana” o “Si intentas alcanzar las estrellas, nunca volverá con las manos llenas de polvo”. Harald Moranz y su esposa Ana han osado bastante… y han creado un pequeño paraíso con Bungalows Morani, donde las semanas más bonitas del año se convierten en el cielo sobre la tierra para los visitantes de la Isla Bonita. ¡Les felicitamos por el aniversario!